En los domingos anteriores Jesús se ocupó de darnos enseñanzas sobre el buen uso de los bienes terrenales, las riquezas, el din ero,... para que nos sirvan para alcanzar la vida eterna, que nos esclavicen, que seamos señores y no esclavos, que sirvan para ayudar a los más necesitados, y que no se conviertan en ídolos.
Hoy el tema central del Evangelio es: LA FE. Los discípulos le piden a Jesús:" Señor, auméntanos la fe. Nos viene muy bien este Evangelio en este primer domingo de octubre porque estamos empezando el curso pastoral y podemos pedirle que esa fe nos fortalezca, aumente, conserve, la cultivemos, vivamos y trasmitamos a los demás, empezando por la familia, los compañeros de trabajo, de ocio, de los amigos,...
La fe se nos regala por el Señor en el Bautismo, luego debemos cultivarla,...pero sabéis muy bien cómo algunas personas han recibido el don de la fe y se fue apagando en ellos/as, caminan a oscuras hacia ninguna parte, mientras que nosotros los que, gracias a Dios, la conservamos, y caminamos con ese don de luz que vemos con claridad el camino; queremos certezas, seguridades, pero las cosas humanas no nos dan seguridades, ponemos nuestras seguridades en las cosas d e aquí abajo, dinero, riquezas,...pero nos damos cuenta-más bien tarde que pronto, de que todo lo humano no nos dan seguridades, porque ellos, los otros, están igual que tu.
Es posible que al ver tanto mal, dolor, catástrofes,guerras, muerte de tantos inocentes,..se puede debilitar nuestra fe, perderla,, debilitarla, dudar, sentir a Dios muy lejano,... Sin embargo Dios está ahí en el que sufre, en el que padece dolor, sufrimiento,...Mira a Jesús-que siendo DIOS- sufrió toda su vida humana, sobre todo en la Pasión, Muerte de cruz, y llegó la Resurrección y Ascensión, pero pasó por el dolor, sufrimiento, humillación,... Ahí está Dios debemos descubrirlo, pero necesitamos cultivar, orar, hacer actos de fe,... porque resulta muy engañoso que queramos creer en lo que nos conviene y no creamos en lo que no nos conviene, que decimos creer, pero no cultivamos y oramos nuestra fe. Seamos consecuentes,... Mira cuanto más grandes sean las dificultades para creer, más debemos poner los medios para creer: orar, sacramentos, meditar las Sagradas Escrituras,... Poneros a la escucha de la voz de Dios: PALABRA DE DIOS.
Dios te sigue hablando y a esa Palabra de Dios debemos responder con un acto de fe, de fiarse de Dios: VERDAD ABSOLUTA E INAMOVIBLE.
Esa fe debemos tomarla como tarea, es decir como un compromiso adquirido en el Bautismo y tomar parte en las tareas de evangelizar a los demás,haciendo lo que tenemos que hacer, practicar las obras de misericordia para que esa fe no sea una fe muerta,
La fe es una esperanza porque todo lo que nos enseña la fe lo podemos alcanzar las promesas de Cristo, de alcanzar la vida eterna, la visión de Dios,...
La fe ha de ser responsable porque como la podemos perder, debemos alimentarla, cultivarla, formarla,..
La fe debemos celebrarla en la Iglesia, no se celebra fuera de la Iglesia, porque la fe verdadera está en la Iglesia de Cristo, la celebramos en la Misa con los demás hermanos y, así, se fortalece y la podemos vivir por la semana ante las dificultades que vamos a encontrar en el mundo. Pidamos al Señor que nos aumente la fe. Santa María, Madre de Dios y nuestra, Madre de la fe, intercede por nosotros para que tengamos siempre esa fe.
No hay comentarios:
Publicar un comentario