DOMINGO 2º DE ADVIENTO. LA INMACULADA

Antes de nada permitidme una aclaración: La Congregación para el Culto Divino y la Disciplina  de los Sacramentos, atendiendo una solicitud de la Conferencia Episcopal Española, ha dispensado para el presente año 2013 de la observancia de las normas litúrgicas que imponen el traslado de la solemnidad de la Inmaculada Concepción al lunes siguiente, por lo que en ESPAÑA SE CELEBRA ESTE DOMINGO DICHA SOLEMNIDAD. Para ello, y con el fin de no perder el sentido del domingo II de Adviento, debe observarse lo siguiente: La 2ª lectura de la Misa debe ser del 2º domingo de Adviento. En la homilía debe hacerse mención al Adviento. En la oración universal se debe hacer, al menos una petición con el sentido del Adviento y concluir con la Oración Colecta del domingo II de Adviento.( notas del Calendario Litúrgico-Pastoral de España-2013-2014)
 Dicho esto pasamos a meditar en la Solemnidad de LA INMACULADA. Gran, alegre y ejemplar fiesta para cada cristiano/a, para toda la Iglesia. La Anunciación del ángel a María es presentada por el evangelista Lucas como un fruto del Espíritu Santo, cuya fuerza del DIOS-AMOR- actúa en la nueva creación, en una nueva humanidad que se pone en marcha. Dios amó, eligió, preparó a María para ser la Madre de su Hijo, encarnado, hecho hombre, en el seno de una Virgen-MARÍA- enviado al mundo con una misión de  salvar al mundo entregándose hasta la muerte y muerte de cruz. TODO POR AMOR. María fue preservada desde  su inicio del pecado original, que ha sido definido en el año de 1854 con la definición del dogma de la Inmaculada Concepción. Dios ama todo lo que ha creado, no destruye nada, porque todo lo hizo con amor y Dios no abandona a nadie de este mundo que quiere ir y caminar hacia Él. Ante el " NO" de Eva y Adán, tenemos en la nueva creación el " SÍ" de María a Dios y el " SI" PLENO de Jesús a la voluntad del Padre para salvar al mundo y María acepta ese plan o proyecto de Dios sobre el mundo y sobre Ella. Los méritos previstos de Cristo para redimirnos, se aplican anticipadamente a María,-para que no caiga ne ningún pecado, ni siquiera el original- del mismo modo que a nosotros se nos aplican después para levantarnos por medio delos sacramentos. En Ella es lógico, porque si Dios viene al mundo para redimirnos del pecado, no podía permitir que al tomar naturaleza humana en María tuviera esta contaminada con la mancha del pecado original, por eso, porque puede, quiere, ama y conviene lo hace. María es concebida sin mancha.
 Al celebrar esta fiesta en el Adviento nos sirve para mirar más María como modelo de esperanza cristiana, de poder imitarla y pedirle ayuda para vivir la espera del Señor, para llenarnos de Dios y así en nuestro caminar hacia el Padre. Por ser la Madre de Jesús, el Hijo de Dios, la preservó del pecado original y de todo pecado colaborando fielmente con la gracia de Dios. María es virgen y debemos destacarlo porque lo que en Ella se encarnó y de Ella nació es "el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo". Debe alegrarse porque es la" llena de gracia de Dios" desde su concepción. Ella es el comienzo de la Iglesia y la Madre de la Iglesia y abogada nuestra y ejemplo de santidad, de unión y fidelidad a la voluntad de Dios. Ella es la primera morada de Dios. Cristo ya venció en María por estar llena de gracia y actuando en Ella de una manera singular, y del mismo modo está venciendo en y con nosotros y también estamos llamados a ser  elegidos para ser irreprochables ante Dios porque nos llama con Amor. Seamos alabanza y adoración al Señor porque todo se lo debemos a Dios. María es el canto nuevo al Señor de la nueva creación. Seamos lo más fieles posible a la acción del Señor. Preparad una buena confesión y una alegre y llena de fe la Eucaristía. Madre Inmaculada, intercede por nosotros para que seamos fieles como tu a la gracia de Dios.