martes, 12 de marzo de 2013

San José, esposo de María. 2013

Como cada año el 19 de Marzo celebra la Iglesia Católica la solemnidad de San José, esposo de la Santísima Virgen María. Es fiesta de precepto, aunque en algunas comunidades  autonómicas  se ha suprimido por razones de ajuste de fiestas laborales y religiosas. El culto a San José se remonta a la Edad Media, como consecuencia de la devoción a la infancia de Jesús. Fue declarado patrono de la Iglesia universal por Pío IX en 1870. San José fue llamado por DIOS para "tomar consigo a María su esposa", que estaba en cinta " del que fue engendrado en ella por el Espíritu Santo"( Mt. 1, 20) para que Jesús " llamado Cristo" nazca de la esposa de José en la descendencia  mesiánica de David( LD).
 San José fue obediente a la voluntad de DIOS. Fue un auténtico servidor fiel y prudente de la voluntad de DIOS, etal como dice la Escritura que tienen que ser los que siguen los caminos de DIOS. Su trabajo- todos sabemos- fue de carpintero y es un modelo de cómo trabajar con el Señor y para el Señor . La liturgia lo tiene como un hombre bueno y fiel, lleno de fe y de esperanza, pues después de casarse con María se marchó a su casa y María a la suya para luego encontrarse al año siguiente y, mientras tanto visita a María el Ángel del Señor y la saluda como "la llena de gracia", la que tiene consigo al Señor y que el Espíritu Santo vendrá sobre ella y concebirá un hijo y le pondrá por nombre JESÚS, porque salvará a su pueblo de los pecados..." María acepta la Palabra de DIOS: " " He aquí la  esclava del Señor, hágase en mí según tu palabra". Y cuando vuelve José al año a buscarla ve que está en avanzado estado de gestación  y, como era justo, no quiso denunciarla y decidió dejarla en secreto, y cuando José se va en silencio se le aparece un ángel del Señor: José, no tengas recelo de recibir a María, tu mujer, en tu casa, porque lo que hay en ella no es obra de hombre, sino del Espíritu Santo. Y José la llevo consigo a su casa. Esto es ser fiel, ser confiado en la voluntad de DIOS. José trabajó duramente cada día, pero con mucha alegría para allegar fondos para mantener una familia. Estaba destinado a custodiar los dos grandes tesoros de DIOS: JESÚS, SU HIJO, y María la Madre de JESÚS.
 Estamos en la Cuaresma y es todo un síntoma celebrar esta fiesta en la Cuaresma porque podemos aprender  a ser humildes, obedientes, sacrificados, convirtiéndonos constantemente al Señor, a vivir la Palabra de DIOS, estar siempre disponibles para servir al Señor y poner nuestro trabajo diario al servicio del Evangelio, a respetar a la persona en su misión de Dios para cada uno de nosotros, como lo hizo José con su esposa María, que siempre la respetó en la misión que el Señor le confió a su esposa.
 San  José intercede siempre por la Iglesia, cuida de todos los fieles porque le ha confiado "los primeros misterios de la salvación". Así José aseguró la descendencia del Mesías de la estirpe de David siendo el padre legal de JESÚS y ,así, salvando también a María de la condena de morir apedreada según la ley.
 Él tuvo consigo y, a su cuidado, al autor de la Iglesia: JESÚS, y en  quien se engendró- que sin dejar de ser DIOS empezó a ser hombre en Ella. Invoquemos mucho a José, esposo de María, la Virgen. También sabemos que es abogado de la buena muerte, pues fíjate que José pasó al Padre en presencia del Salvador, de JESÚS y de María. Bendita sea la excelsa Madre de DIOS, María Santísima. Bendito sea San José, su castísimo esposo. Que María y José os protejan  en todo y siempre.

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