lunes, 24 de agosto de 2015

DOMINGO 22. T.O. 2015. DAR CULTO A DIOS EN ESPÍRITU Y VERDAD

 Terminado el capítulo 6º de S.Juan con su diálogo sobre el pan de vida, retomamos ahora al evangelista de este año
litúrgico o ciclo B. siendo guiados por el evangelio de S.Marcos.
 Se acercaron a Jesús un grupo de fariseos y letrados y vieron como los discípulos de Jesús comían sin lavarse las manos pues los judios se lavan las anos antes de comer-aferrándose a costumbres de sus antecesores y preguntan a Jesús:¿ por qué comen tus discípulos con manos impuras y no siguen las costumbres de los mayores? La respusta de Jesús:" este pueblo me honra con los labios, pero su corazón está lejos de mí. El culto  que me dan está vacío, porque la doctrina que enseñan son preceptos humanos,... Dejáis a un lado el mandamiento de Dios para aferraros a la tradición humana".
 Debemos destacar que Jesús nos está indicando cómo ha de ser el culto que le tributemos, culto interno y no solo externo; culto interno que debe traducirse y manifestarse al exterior. Nos llama Jesús a un verdadero culto interior, de corazón, que salga de nuestro corazón lleno de amor a Dios. Podríamos preguntarnos a este día de hoy:¿ Qué culto da la Iglesia a Dios? ¿ Qué culto damos cada uno de nosotros, los miembros de la Iglesia, al Señor? Sobre todo al celebrar y vivir la Eucaristía-sobre todo los domingos. ¿ Hay hipocresía? ¿ Hay ropaje damos a  cada acto litúrgico dirigido al Señor, nuestro Dios?. Pensemos en la rectitud y sinceridad de nuestras reuniones. ¿ Hay alegría en cada Eucaristía, hay adoración, hay comunión con el Señor y con los demás? ¿ Hay compromiso religioso, social? ¿ Acogemos con gusto la Palabra de Dios y la llevamos a la práctica de cada día?¿ Salgo frío, si que me haya dicho nada la celebración religiosa?
 Los fariseos añadían normas y normas( hasta 613 normas humanas) y abandonaban el mandamiento de Dios. Es un subterfugio  para no cumplir-mejor vivir- los mandamientos de Dios y suplantarlos por los suyos, los humanos; esto mismo sucede hoy con las leyes injustas que dan los gobiernos, jefes de estado, para hacer cumplir a los demás leyes humanas, hueras, vacías, humanas para que se pusieran por encima de la ley de Dios y al hombre suplantado a DIOS( la tentación de los ángeles, de los primeros pobladores de la tierra, de hoy y de siempre:" seréis como Dios". El hombre se antepone a Dios y Dios es su segundo:" un criado a mi servicio".Jesús alaba a los fariseos por su observancia de la ley, pero no los alaba  porque su corazón está seco, duro, como corcho, falta vida; Jesús no nos da normas, nos DA VIDA: " Yo he venido para que tengan vida y la tengan abundante".
 Podemos caer en " palabrerías ante Dios y ante la asamblea" que no nos dicen nada, La ley debe acercarnos  a Dios y a los hermanos y no alejarnos de Dios y de los hermanos. En cada mandamiento hay una voluntad de Dios, hay una vida divina que nos llena, que nos sacia, que nos plenifica y nos hace felices; por esto debemos preguntarnos:¿ nuestro corazón está lleno de Dios? entonces todo tu culto será agradable al Señor. Tenemos al Señor en nosotros, en nuestro corazón, entonces hay algo muy grande dentro de ti porque quieres vivir y no cumplir: VIVAMOS Y NO CUMPLAMOS SOLAMENTE LAS LEYES DE DIOS. Todo lo que procede de Dios y, por tanto, de nuestro corazón, nos conduce a vivir del Espíritu y a vivir la vida divina. Vivamos cada Eucaristía con fe, con amor y alegría. Santa María, Madre de Dios intercede por nosotros, tú que has vivido la voluntad de Dios en todo momento.

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