TERCER DOMINGO DE ADVIENTO. 2014.LA ALEGRÍA EN EL SEÑOR.

 En este tercer domingo de Adviento se nos invita por parte del Señor, de la Liturgia y de la Iglesia: el gozo en el señor. ¿ por qué? Porque el Señor está cerca. A todos los pusilánimes, cobardes de corazón,: sed fuertes, no temáis. Mirad a nuestro Dios que viene a salvarnos y nos salvará. No os quepa la menos duda. Los fieles cristianos esperan con fe la fiesta del nacimiento de Jesús, de Cristo, que es una fiesta de gozo y de salvación. La alegría no nace de cosas efímeras, temporales que son momentáneas, pasajeras, en las que pone el hombre y mujer  su deleite y que se queda muchas veces menos satisfechos que antes,... Todos deseamos ser felices, dichosos, estar alegres, pero con la felicidad, alegría de la presencia de Dios, porque solamente el Señor es la alegría, el gozo y fuente de alegría y gozo para todos ser humano.No confundamos a nadie. Las Escrituras no nos hablan de las alegría humanas, sino de la alegría y gozo de la presencia del Señor y que solo de Él procede. Pensemos en acertar en la verdadera alegría, felicidad y no te acordarás más de las otras alegrías humanas.. Solo Cristo nos puede hacer plenamente felices, dichosos, alegres porque de Él sale toda fuente de santidad, gracia y alegría. Una persona triste no vive cristianamente unido a Cristo.. Debemos dejarnos que Jesús entre en nuestro en nuestro corazón, en nuestra vida para que se puede llenar toda nuestra vida que busca la felicidad y lo anhela de verdad, pero solo el Señor nos puede dar y llenar del todo. El se nos ofrece a todos para hacernos felices, es la causa de nuestra esperanza.
 San Pablo nos recuerda con tres consignas para ayudarnos a ser felices: A)  ESTAR ALEGRES. Piensa ¿ cómo es posible que un hijo de Dios esté triste,? Sabiendo que Dios, nuestro Padre, nos ama y nos envía a su propio y único Hijo. Imposible con el Señor la tristeza.
 B) ORACIÓN . Estamos en el V centenario del nacimiento de Santa Teresa. Conversar con  el Señor, escuchar a Dios, que es al único que merece la pena eschchar." Decía la santa:" Tratar de amistad estando muchas veces tratando a solas con quien nos ama". Si descubriéramos el Don de Dios, el Espíritu Santo que ora en nosotros con gemidos inenarrables y nos pone en nosotros las palabras que debemos decir al PADRE. Diálogo entre CRISTO y nosotros. Seamos almas de oración, busquemos unos minutos para escuchar al Señor es lo único que merece la pena, que llena, que satisface, que nos hace felices.
C) ACCIÓN DE GRACIAS. También debemos saber o aprender a dar gracias a Dios de todo corazón, con toda el alma, en todo tiempo y lugar. La mejor acción de gracias es la misa, la Eucaristía, es el mismo Hijo de Dios, hecho hombre por nosotros se entrega a la muerte de cruz y resucita para nuestra justificación. Que aprendamos, Señor, a saber darte gracias ante el sagrario, adorarte, bendecirte, ofrecernos de todo corazón a ti. Seamos almas de oración. SANTA maría, Madre de Dios y nuestra intercede por nosotros para que seamos felices como tu con Jesús.