DOMINGO 29 T.O. 2014.. DOMUND 2014. RENACE LA ALEGRÍA.

El Evangelio de este domingo-como siempre- el Señor viene a nuestro encuentro para alimentarnos con su Palabra y con su Cuerpo y Sangre para que estemos fuertes para recorrer el camino hacia el Padre. El Espíritu Santo nos fortalece con sus dones y acción de lo alto para que nos identifiquemos más y más con Cristo. Hoy quiere sepamos dar a Dios lo que es de Dios y al César lo que es del César. "Todas las cosas son vuestras, vosotros sois de Cristo y Cristo es de Dios". No nos olvidemos que por encima de los poderes políticos está el poder de Dios, pues nos dice Jesús en los momentos difíciles de su pasión ante Pilato:" no tendrías ningún poder sobre mi, sino te fuera dado  de los alto". Los cristianos debemos respetar a las autoridades civiles, pues ser fieles es una virtud cristiana y debemos de participar en la vida política con limpieza ética y moral, para ir echando a la orilla los corruptos. Todos debemos estar al servicio de los demás como Cristo. La autoridad es querida por Dios, es un proyecto divino, ved lo de Ciro en la primera lectura de hoy, que siendo pagano, es ungido por Dios; y desobedecer a las autoridades es desobedecer a Dios nos dice S.Pablo-siempre que no ordenen  algo contrario a la ley de Dios. Nosotros los cristianos-con las virtudes de la fe, esperanza, el amor ser luz y sal de la tierra- para todos los hombres, y esto nos viene muy bien ante la jornada del DOMUND.
  El lema de este año es:"RENACE LA ALEGRÍA", dos palabras de la "evangelii gaudium". "Renace porque con Jesucristo siempre nace y renace la alegría". En las Misiones es un lugar adecuado para nacer y renacer la alegría porque se anuncia el Evangelio para llevar- con la gracia de Dios esos pueblos que todavía no conocen a Jesús: LA VERDADERA ALEGRÍA. Se anuncia el Evangelio a los más marginados:niños/as y mujeres para sacarlos de los infravaloraciones y esclavitudes en que están sumidos y que la Iglesia- a través de los misioneros los van formando para que superen obstáculos en su vida. La actividad misionera de la Iglesia es hacer que nazca y renazca la luz de la fe, pues a base de tratar con el Señor los apóstoles fueron creciendo en la fe y, por tanto en la alegría del Evangelio.
 La alegría es un aspecto esencial  de toda evangelización, pues el anuncio del Evangelio da satisfacción interior, alegría de corazón, de saber amar y renunciar a uno mismo para ser más de Cristo y de los marginados. Esa alegría que nos viene del Padre fuente de amor y de alegría, del Hijo que nos manifiesta al Padre, y del Espíritu Santo que anima y vivifica la vida de la Iglesia, del compromiso bautismal de anunciar el Evangelio a todo la creación, a todos los pueblos. Los apóstoles -llenos de alegría- proclaman el amor del Padre, la gracia del Hijo y la comunión del Espíritu Santo. Podríamos preguntarnos si estamos alegres en la fe Cristo y como sus seguidores, meditemos porque podemos pensar de que somos buenos cristianos y la falta de alegría puede ser un detector de nos seremos tan buenos creyentes y comprometidos con el Evangelio de Cristo. Anímate y entra en el torrente de alegría de anunciar con seriedad el Evangelio de la alegría.
 El Domund de este año nos brida la ocasión de renovar nuestra alegría del Evangelio, del compromiso misionero. Seamos creyentes de verdad y trabajadores de su viña. Santa María, Madre de la Iglesia y de los misioneros, de todos los que con la gracia de Dios anuncian el Evangelio de la salvación, ruega por nosotros.