Lo central es lo primero, la OCTAVA DE NAVIDAD, Y DE SANTA MARÍA, MADRE DE DIOS.
No nos olvidamos, ni podemos olvidarnos del NIÑO QUE HACE 8 DÍAS CELEBRAMOS SU ANVERSARIO DEL NACIMIENTO, SEGÚN LA CARNE DE MARÍA, DE SU CUMPLEAÑOS. Jesús es el centro no solo de la historia, sino, sobre todo de nuestras vidas, quien da sentido y motivación de nuestra existencia, de nuestra vida. Es quien llena nuestra vida y nuestro corazón.
Era el año 431, cuando en Éfeso se celebró un concilio para definir la fe en que MARÍA ERA, MADRE DE DIOS, fe que el pueblo fiel creía de corazón. Los Padres conciliares expusieron la doctrina fundada en la misa Sagrada Escrituras, cosa que el pueblo no llegaba a tal, pero los Padres si sabían y debían dar fundamento y explicación en la fe de este dogma, contra el Patriarca de Constantinopla, Nestorio, que lo negaba. El pueblo creyente creía lo contrario y se definió : QUE MARÍA ES LA MADRE DE DIOS ( theotokos) : MADRE DE DIOS.. El Verbo de Dios, el Hijo de Dios, sin dejar de ser Dios, se hizo hombre, empezó hacerse hombre por la acción del Espíritu Santo en MARÍA Y QUIEN DE MARÍA NACE ES EL EL HIJO DE DIOS, EL VERBO DEL PADRE, SU VERBO, SU HIJO QUE SE ENCARNA EN EL SENO DE MARÍA POR OBRA DEL ESPÍRITU SANTO Y, POR TANTO, QUIEN NACE DE MARÍA ES SU HIJO Y ESE HIJO ES DIOS CON NOSOTROS. JESÚS CON UNA SIOLA PERSONA, LA DIVINA Y CON DOS NATURALEZAS, LA DIVINA Y LA HUMANA; NO DEJA LA PRIMERA Y ADQUIERE LA SEGUNDA.
Jesús es el SALVADOR DEL MUNDO.; ES EL HIJO DE DIOS ENGENDRADO, NO CREADO DESDE TODA LA ETERNIDAD Y ES HIJO DE MARÍA EN EL TIEMPO, PUES NOS DICE LA SAGRADA ESCRITURA ( Gál. 4.4-5) " Cuando llegó la plenitud de los tiempos, Dios envió su Hijo al mundo, nacido de mujer, para que los que estábamos esclavizados por el pecado, recibiéramos el espíritu de adopción de la libertad de los hijos de Dios".
Con toda razón podemos decir que " DIOS ES MI Padre y nosotros sus hijos.
Tengamos unos momentos cada día de saber parar en medio de la baraunda de las prisas de cada día, para saber saber tener esa serenidad y paz interior, personalidad., no ser máquinas que andamos por el mundo aturdiods y ser saber nuestra dignidad y vivir con paz interior.. No perdamos nunca nuestra dignidad de seres humanos, criaturas de Dios e hijos suyos.
Finalmente invoquemos al Príncipe de la paz, que s Dios con nosotros, es decir: JESÚS. LA PAZ ES POSIBLE, TRABAJEMOS CADA UNO POR ESA PAZ QUE TANTO NECSITRA EL HOMBRE Y LA MUJER INTERIOR Y EXTERIOR ENTRE LOS HOMBRES Y LOS PUEBLOS, PERO PRIMERO LA PAZ INTERIOR..
Santa MARÍA, Madre de Dios y nuestra, intercede por nosotros para vivamos como hijos tuyos y discípulos de Jesús. y alcánzanos la paz..
¡¡¡ FELIZ AÑO NUEVO LLENO DE BENDICIONES DE DIOS, COGIDOS DE LA MANO DE NUSTRA MADRE MARÍA.!!!