DOMINGO 18 DEL TIEMPO ORDINARIO.2 DE AGOSTO DEL 2020. EL MISTERIO DEL PAN.

Una vez que se pasó el capítulo 13 de S.Mateo sobre las parábolas del Reino de los Cielos. Seguimos los pasos de Jesús en su andar por Palestina. Hoy invita a los suyos a ir a un lugar  tranquilo, separado, apartado para descansar y orar y poder también explicarles bien las cosas que no quedaban claras para sus amigos. Así con este reposo en un lugar solitario se van a recuperar energías, que apreciaran lo que vale la relación personal entre ellos y de ellos con Jesús y de Jesús con ellos, todo sin prisas, sin nervios, de fomentar la confianza entre ellos y de ellos con Jesús y de apoyarse entre ellos, de experimentar la amistad, la fraternidad,...
 El tiempo de vacaciones que pueden disfrutar bastantes personas se podría orientar de este modo, a descansar, de retomar un vida religiosa dando un espacio al Espíritu Santo para que ilumine y fortalezca nuestra vida espiritual, descansando, leyendo buenos libros, orando, disfrutando de la familia más y colaborando en las labores de la familia y del hogar, de orar juntos y con los hijos, de saber aumentar más el cariño en el hogar, la unidad familiar, dedicar más tiempo a la formación de los hijos que es el verdadero tesoro de vuestro amor.
 En el Evangelio de hoy, se nos presenta por la Iglesia, nuestra Madre, para que nos adentremos en el misterio del amor de Dios hacia nosotros, HACIA TODO SER HUMANO. A Jesús le sigue una gran multitud enardecida por su PALABRA DE VIDA, POR SU PERSONALIDAD, POR SU CARIÑO Y AMOR HACIA TODOS. " NADIE HA HABLADO COMO ESTE HOMBRE". Sentimos hambre de Dios, sed del amor de Dios, de unidad y de fraternidad entre nosotros como nos enseñó Jesús en sus tres años de vida `pública. Los discípulos le dicen que los despida  para que vayan a pueblos vecinos y compren algo que comer, pues estaban en despoblado, pero Jesús les responde :"Dadles vosotros de comer" hay aqui un chico que tiene 5 panes y 2 peces,... Jesús les dice: dicidles que se sienten. DA GRACIAS AL PADRE y los multiplica y sobran varios cestos de pan y de pescado después de saciarse todos-eran 5000 hombres, sin contar mujeres y niños- EL PAN-SABEMOS QUE ES NECESARIO PARA VIVIR, alimento básico, aunque aquí no se trata solo del pan material en su dimensión humana y de hogares o restaurantes,...no se trata con una dimensión más profunda, más sobrenatural como el PAN DE LA EUCARISTÍA, PAN DE SALVACIÓN, VIÁTICO PARA LA VIDA ETERNA, ANTICIPO DE DEL BANQUETE DEL CIELO. Jesús dice: " Venid  vosotros, benditos de mi Padre porque tuve hambre y me distéis de comer..." Ante el esfuerzo por seguir a Jesús necesitamos alimentarnos y este alimento es el " pan vivo bajado del cielo: el HIJO DE DIOS.
 Jesús- HIJO DE DIOS- al multiplicar los panes está anticipando el sacramento de la EUCARISTÍA. Pan de fuerza divina, es el alimento espiritual para ser buen cristiano. Jesús en la Última Cena :toma pan, lo bendice también y pronuncia las palabras de consagración y por las mismas y su autoridad divina realiza el signo real de convertir el pan en su Cuerpo y el vino en su Sangre, anticipo de lo que empezaba a realizarse  en aquella noche de traiciones, de abandonos, de olvidos,  hasta que llega el momento del supremo amor de Cristo en la Cruz y cada vez que participamos en la EUCARISTÍA, EN LA MISA, ESTAMOS PARTICIPANDO EN NUESTRA REDENCIÓN.
 También sería bueno recordar las palabras de nuestros obispos de que vayamos volviendo a las Eucaristías dominicales al templo es decir con PRESENCIA CORPORAL. NO TENGÁIS MIEDO, SED,POR OTRA PARTE, RESPONSABLES SIEMPRE Y MUY PRUDENTES.. Vivamos la Eucaristía y de la EUCARISTÍA. Santa María, Madre de Dios y nuestra, enséñanos a participar  en la EUCARISTÍA COMO TU AL PIE DE LA CRUZ.
 A los podáis ir de vacaciones acercaos a CRISTO EUCARISTÍA CON UNA BUENA CONFESIÓN. FELICES VACACIONES.