Seguimos meditando el capítulo 6º de Juan:DISCURSO DEL PAN DE LA VIDA. Continuamos en la sinagoga de Cafarnaún y Jesús afirmando cada vez con más vitalidad la realidad de la EUCARISTÍA. Jesús sigue hablando de sí mismo como EL PAN DE VIDA, pero añade que el pan que Él ofrece es su propia carne, entregada para que el mundo tenga vida. No olvidemos que el mismo Jesús en la Última Cena es una referencia a su muerte sacrificial es muy clara y en referencia a la muerte y resurrección al tercer día. Todo es una indicación a la Eucaristía: " el pan que yo daré es mi carne"," el que come mi carne y bebe mi sangre tiene vida eterna"." habita en mí y yo en él, y " el que come este pan vivirá para siempre". Jesús nos está hablando del contenido de un banquete-no solo por ser de verdad un banquete, pero debemos fijarnos más en el contenido que en la forma de un banquete-: " MI CARNE ES VERDADERA COMIDA Y MI SANGRE ES VERDADERA BEBIDA" esta frase de Jesús es muy clara y determinante, Es el banquete de su cuerpo, como lo escuchamos cuando instituye la Eucaristía:" TOMAD Y COMED PORQUE ESTO ES MI CUERPO, MI CARNE, indicando la totalidad de la persona, de la persona de JESÚS MUERTO Y RESUCITADO,... Y es entonces cuando los judios ante este lenguaje de Jesús, que reconocen, comprenden, entienden de que Jesús está hablando con toda claridad; " el que come de este pan, vivirá para siempre. Y el pan que yo daré es mi carne.YO LA DOY PARA LA VIDA DEL MUNDO, pero que no lo admiten y protestan ante Jesús diciendo:" ¿Cómo puede este darnos a comer su carne? Y Jesús podría rectificar para ganarse a las gentes, ¡hombre no me interpretéis así, no he querido decir eso se debe interpretar así,.. ¡NO! SIGUE EXPLICANDO QUE SI NO COMEMOS SU CARNE Y BEBEMOS SU SANGRE NO TENEMOS VIDA EN NOSOTROS. EL QUE COME MI CARNE Y BEBE MI SANGRE TIENE VIDA ETERNA Y YO LO RESUCITARÉ EL ÚLTIMO DÍA" Y SIGUE DICIENDO JESÚS:"EL QUE COME MI CARNE Y BEBE MI SANGRE, VIVE EN MI Y YO EN ÉL Y DEL MISMO MODO QUE YO VIVO POR EL PADRE.ASÍ TAMBIÉN EL QUE ME COME VIVIRÁ POR MI"
Considero que también nosotros deberíamos sentirnos interpelados de cómo sentimos vivimos, recibimos al Señor en la Eucaristía; pues puede darse el caso de que dudamos de QUE ESE PAN CONSAGRADO ES JESÚS Y DE QUE ESE VINO CONSAGRADO ES LA SANGRE DE CRISTO porque tenemos rutina, nos acostumbramos a comulgar sin pensar más en el misterio de la fe.
Si queremos tener la fuerza de los santos debemos alimentarnos como ellos: del CUERPO Y LA SANGRE DE CRISTO.si queremos tener vida eterna y resucitar debemos de recibir en gracia de Dios. No olvidemos que cuando comulgamos recibimos a Jesús y es el mismo Jesús el que viene a nosotros a pesar de que nunca seremos dignos de recibir al Señor, pues solo Dios es digno de si mismo, si viene a nosotros es por amor y para alimentarnos, ayudarnos hacernos más dignos para recibirle. Que Dios nos conceda la gracia de permanecer en gracia de Dios y recibirlo en su gracia y que permanezca en nosotros.
Santa María, Madre de Dios y nuestra, intercede por nosotros para que recibamos a Jesús siempre en gracia de Dios.
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