lunes, 24 de junio de 2013

JESÚS DECIDE SUBIR A JERUSALEM. DOMINGO 13 T.O. 2013

 En el evangelio de este domingo Jesús toma la decisión irrevocable de subir a Jerusalém, empieza su subida, larga, dura, difícil, pero  decisiva y que le va a llevar a estar con el padre-como estaba antes lleno de gloria-pero que debe realizar la misión que el Padre le encomendó: Redimir y salvar al genero humano( alejado de Dios en unos casos o separado de Dios por usar mal su libertad). Tiene voluntad decidida y sabe lo que le espera, pero antes debe realizar unas catequesis sobre el reino de Dios, revelar al Padre, abrir el camino de la salvación, de la vida y de unos valores cristianos que nos indican el camino que nos identificará con Jesús: Camino, Verdad y Vida, para ir al Padre. La decisión tiene  fuerza extraordinaria, decisión radical, sin vuelta, no tiene vuelta atrás. Nos enseña el Señor como debemos tener fuerza de voluntad cuando tomamos una decisión de seguir a Jesús, podemos  tener fallos porque somos frágiles, "este tesoro lo llevamos en vasijas de barro", pero no desanimarse porque es superior la fuerza y la gracia de Dios para levantarnos, para ayudarnos a seguir adelante en la decisión de seguirle adondequiera que vaya Jesús y que nos quiera llevar Él-que sabe más y nos quiere más que nos queremos a nosotros mismos- Estad alegres y tened confianza en su gracia que no nos falla nunca.
 Por otro lado, el evangelio nos muestra también la actitud de algunos que quieren ser discípulos suyos, pero que ponen condiciones. Jesús nos recuerda que el verdadero discípulo suyo es el " que escucha la Palabra de Dios y la cumple, como hizo su Madre María, que conservaba todas las cosas meditándolas en su corazón y, por supuesto, como fruto de esa meditación llevarla a la vida. Jesús sube, pero parece que no hay muchos dispuestos a seguirle. La aldea donde preguntan si les daba hospedaje no lo reciben.¡Cuánto rechazo de Jesús entonces y ahora!¡Cuánto perdemos!. Nunca se tiene en cuenta todo el bien que Jesús hizo en Palestina: resucitando muertos, curando enfermos, perdonando pecados, limpiando leprosos, expulsando demonios, curando ciegos, sordos,... También hoy se rechaza a Jesús, a la Iglesia, al Papa, obispos, sacerdotes, a todos aquellos que que quieren llevara a Cristo a los hermanos. "A los que le reciben les da poder de llegara ser hijos de Dios , y vino a los suyos y los suyos no lo recibieron". Una cosa es ser llamado y otra es ofrecerse. El primero se ofrece y Jesús le responde que "Las raposas tienen su madriguera, y las aves del cielo tienen su nido, pero el Hijo del Hombre no tiene donde reclinar su cabeza, Al otro le dice a secas:"Sígueme" no hay más palabras; el tercero pone como condición para seguirle: " despedirse de su familia" Lo que nos quiere enseñar este evangelio es el estar dispuestos siempre,desprendidos de todo poder seguir al Señor en un momento puntual de la llamada del Señor y de nuestra respuesta a esa llamada.La verdad final es que tenemos todos algún obstáculo para seguir al Señor: El pecado, el egoísmo, el estar demasiado atados a las cosas de este mundo y muy alejados de la Voluntad de Dios. Todo es posible para el que ama. No temas  porque con la ayuda de Jesús podemos seguirle. Amemos con todo el corazón a Cristo. Santa María, Madre de Dios y madre nuestra intercede por nosotros para que estemos cada día más desprendidos de las cosas de este mundo para- con entera y alegre libertad- decidirnos por amar y seguir al Señor como tu.

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