viernes, 10 de agosto de 2012

LA ASUNCIÓN DE MARÍA A LOS CIELOS. 2012

En este día 15 de agosto celebramos a la Virgen de Agosto: Nuestra Señora de la Asunción. Fiesta con una carga profundísima de fe y de esperanza. Pues contemplamos a María plenamente redimida, es decir, viviendo y gozando de la visión de DIOS  en el cielo no sólo con su alma, sino también con su cuerpo.Nosotros cuando nos muramos irá nuestra alma a la presencia de DIOS y nuestro cuerpo se depositará en una sepultura en el Campo Santo o Cementerio esperando la futura resurrección universal al final de los tiempos. En María no ha sido así, porque en María todo a sido un "SÍ" a DIOS colaborando fielmente con Él y dejando que el HIJO DE DIOS, EL VERBO, se hiciera hombre en sus seno para redimir al género humano, por eso también, conforme a definición dogmática no ha contraido pecado, ni el original por un anticipo de los méritos de JESÚS ( Inmaculada Concepción), del mismo modo que no contrajo pecado, tampoco podía sufrir la corrupción del sepulcro. En la misma definición dogmática de la Asunción( 1-XI-1950 por el Papa Pio XII).Lo que María fue, somos nosotros ahora; y lo que Ella ahora es, lo seremos nosotros en la resurrección universal.
 María, Madre de JESÚS-DIOS, ha sido fiel plenamente toda su vida y colaboró totalmente a la obra de su HIJO en la redención del mundo. Tal es así que el ESPÍRITU SANTO por boca de Santa Isabel le dice: "Dichosa tu porque has creído" Debemos vivir despertando y alimentando más cada día el gran don de la fe que DIOS  nos ha regalado a todos, aunque no todos la hayan acogido o la acojan. "El justo vive de la fe". María es modelo de fe para todos nosotros en buscar, encontrar, tener y comunicar a JESÚS.¡Cuántos seres humanos ponen toda su vida en las cosas humanas y no miran más allá de esta vida presente! Les falta, por ello, la felicidad verdadera, tienen, sí, felicidades temporales, pero no la felicidad que perdura. Debemos apoyarnos  en JESÚS, como María, llena de fe. La fe no solo es confesión, es adhesión al misterio vivo de DIOS en todas las maneras de manifestarse a los hombres: Vida, Amor, Perdón, Alegría, Felicidad, Esperanza, Acogida, Pobreza, Gracia,...
 Y es una fiesta de ESPERANZA. Pues, del mismo modo, que ahora María está en cuerpo y alma en el  Cielo, así un día estaremos nosotros como Ella viendo y gozando de la visión y compañía de DIOS con la seguridad  de que no lo perderemos jamás.

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