DOMINGO 25 T.O. 2019: ADMINISTRADORES FIELES.

En cada página evangélica Jesús nos va exhortando a " como debemos vivir los discípulos suyos.Hoy nos propone con una parábola la " del administrador infiel. Clara opción para seguir a Jesús siendo buenos administradores de los bienes celestiales y gracias de Dios o malos administradores.
 Cuando nos encontramos en el domingo, día del Señor, sino para encontrarnos con Jesús-Señor con nosotros- que viene con un mensaje de salvación y de práctica cristiana.Escuchemos, asumamos y llevemos a la práctica lo escuchado. Jesús sigue llamando nuestra atención para que sepamos bien lo que debemos hacer con las cosas terrenas, los bienes, las riquezas,...que tanto daño, injusticias,egoísmos,... producen, cuando no escuchamos en nuestro interior la verdad de Dios. El Evangelio nos enseña a ver el valor relativo de los bienes presentes y de que nos demos cuenta de que somos solo administradores. Busquemos los bienes de arriba donde está el Señor; buscad los bienes del Reino y todo lo demás se os a dará por añadidura".
 Sepamos administra bien todos los bienes. La honestidad de nuestra vida- siguiendo a Jesús- debe ayudarnos ayudarnos  a ser administradores justos, honestos, a saber elegir entre el Señor y las cosas del mundo, evitar la  corrupción, la avaricia, el abuso   sobre los deudores, intereses abusivos, ...tramposos  en los pesos, las balanzas, incremento de precios,...elegir entre fidelidad o infidelidad, que sepamos conocer el bien que se puede hacer con los "bienes de este mundo para ganar los eternos"
 Jesús en el Evangelio no alaba su comportamiento-que es a todas luces malo- sino su astucia para asegurarse  el futuro. Nosotros los discípulos debemos actuar de la misma manera con astucia y sabiduría con los bienes de este mundo para ganarnos los eternos; bienes que se ganan  o se pierden de como usemos los bienes presentes; por encima de todo debemos mantener la vida de comunión con Cristo, como Él la tuvo siempre con el PADRE; comprendemos que los bienes presentes son necesarios y trabajamos para asegurar la vida de familia,...pero que no se peque nuestro corazón a nada de lo presente, siendo fieles siempre al Señor y a su voluntad; el administrador fiel es leal a su amo y administra rectamente. Todo lo que Dios nos ha concedido es para nuestro uso, no en beneficio propio, egoísta, sino con amor  mirando a Dios en los pobres. Recordemos que somos administradores y no dueños, administremos conforme a la voluntad de DIOS; ADMINISTREMOS BIEN DICHOS BIENES Y CONSIGAMOS-POR MEDIO DE ELLOS- LOS DEL CIELO. Santa María, la mejor administradora de los bienes de Dios, ruega por nosotros.