15 DE AGOSTO 2019. MARIA EN CUERPO Y ALMA EN EL CIELO.

Los teólogos no hablan de muerte de María, sino de durmición, de tránsito de este mundo al cielo, de ser subida al cielo.
 María en esta fiesta de su Asunción- llevada desde esta tierra a la presencia de la gloria de Dios- nos indica para nosotros una fiesta de esperanza, pues, asi, como María está en cuerpo y alma en la presencia de Dios, así estaremos un día nosotros por la misericordia de DIOS y porque Dios siempre cumple sus promesas; nuestros hermanos fallecidos, van sus almas a la presencia de Dios y son juzgados en un instante y sus cuerpos los depositamos en el Cementerio o Campo Santo, esperando la resurrección universal y, entonces se  realizara la redención plena, pues Jesús salva a la persona, es decir al hombre y a la mujer como somos.espíritu y carne.Hasta que nuestro cuerpo no esté con su espíritu en el cielo glorioso e inmortal como nos la conseguido Cristo no se realizará la redención plena, total por la muerte y resurrección de Cristo.
 También es importante tener presente que María es la criatura más hermosa de la creación y si la ensalzamos no la elevamos hasta convertirla en Dios, sino que es una manera de agradecer todas las gracias que Dios ha derramado sobre María y que María supo agradecer y referirlas al Señor siempre como cosa de Dios y no de Ella, pues María misma agradece y engrandece la obra de Dios en Ella, María es la primera redimida plenamente,a la primera que se le aplican los méritos de Cristo anticipadamente para que no cayera en ninguna mancha de pecado, ni el original, y todo porque iba a ser la Madre del HIJO DE DIOS: JESÚS. Todo porque iba a ser la Madre del Hijo de Dios. María no es el centro , el centro lo es Dios, lo es su hijo hecho hombre:CRISTO y el Espíritu Santo que lo encarna en el seno purísimo de María. Cristo es el centro de la redención y de la Iglesia, actual pueblo de Dios y María tiene-como no- un puesto eminente ante la SANTÍSIMA TRINIDAD, COMO HIJA  PREDILECTA ,COMO MADRE AMANTÍSIMA Y COMO ESPOSA FIDELÍSIMA.
 Debemos de tener una mirada muy clara sobre nuestra Madre del cielo: María, porque María es el faro que con su luz nos orienta siempre hacia Dios, a mantenernos despiertos ante los mensajes de María de parte de Dios a los hombres y que nunca nos olvidemos de lo que enseñó Jesús y sigue transmitiendo   la Iglesia. Escuchemos a Jesús como lo escuchó María y como quiso el PADRE  cuando dijo:" ESTE ES MI HIJO, EL AMADO, ESCUCHADLO. Toda nuestra vida debe estar a la escucha de Jesús.
 Alegraos por esta fiesta porque al meditarla nos llena de alegre esperanza de así como María ya ha sido glorificada y, un día los eremos nosotros los fieles de Jesús. Merece la pena seguir a Cristo. Merece la pena mirar a María. No te pesará. SANTA MARÍA, ASUNTA AL CIELO, RUEGA POR NOSOTROS.