17 DE MAYO DEL 2020. EL ESPÍRITU SANTO HUESPED DEL ALMA.

En el tercer domingo del mes de mayo y 6º de Pascua Jesús nos va haciendo ya indicaciones del que es conveniente de Aquel va a venir, que el PADRE Y ÉL VA A ENVIAR: AL ESPÍRITU SANTO. EL AMOR DE DIOS.
Sigamos con gozo y alegría en los días de Pascua, nos hemos preparado para celebrarla de una manera única, pues que disfrutemos, nos hemos preparado como nunca. Que se note de verdad que tenemos a JESÚS EN NOSOTROS, QUE HEMOS RESUCITADO CON JESÚS. ser conscientes de que esta realmente resucitado, vivamos este misterio del amor y poder de Dios. NO ES ALGO DE UN PASADO.ESTE MISTERIO SE ACTUALIZA CADA  AÑO POR LA PASCUA Y  EN CADA EUCARISTÍA .VIVIR LA PASCUA CON FUERZA Y ARDOR.
 Vivamos el amor que Jesús nos dice, pues Jesús va delante, considerar el amor del PADRE que envía a su Hijo, su Hijo que se entrega por amor en la cruz por nosotros, que nos promete el Espíritu SANTO QUE ES EL AMOR DE DIOS. El amor de Dios es signo, realidad para fundamentar la vida de cara al Reino de los cielos. DIOS ES AMOR INCANSABLE AL SER HUMANO POR ÉL CREADO Y QUE NO SE CANSA DE AMARNOS.
 Pero vivir el amor, la caridad transformada en obras de misericordia es duro, difícil  necesitamos de la gracia de Dios, por eso Jesús nos empieza ya a hablar ya de que conviene que Él se vaya y de que nos venga el Paráclito . Jesús habla y mentaliza a los suyos de su vuelta al PADRE DE DONDE VINO Y SALIÓ Y NOS ABRE LAS PUERTAS DEL CIELO. Jesús habló de su despedida ante su pasión y muerte, nos habló de sus apariciones intermitentes, ahora nos habla de otra despedida de su subida al cielo y no lo verán hasta que estén con Él en el REINO DE LOS CIELOS.
 Jesús sigue con nosotros en una nueva presencia-muy importante- y no quedarnos en pensar en tiempos pasados, muy hermosa, íntima, personal, comunitaria o de Iglesia,... Jesús no camina con nosotros como con los de Emaús, sino que camina con nosotros en nuestro interior por su ESPÍRITU, el ESPÍRITU DE LA VERDAD, EL DEFENSOR, EL QUE NOS VA A CONSOLAR, ALEGRAR INTERIORMENTE EN NUESTRO CORAZÓN Y ALMA PARA IDENTIFICARNOS MÁS CON  CRISTO COMUNICANDO GRACIA, VIDA, COMPAÑÍA, SEGURIDAD, PAZ, AMOR, SALVACIÓN. Experimentemos esta acción del Espíritu Santo en la Palabra de Dios, en los sacramentos, en la oración.  La misión a la que hemos sido llamados y enviados es sublime y la realizaremos gracias a la gracia de Dios, al ESPÍRITU santo El ejemplo y la vivencia es MARÍA, ( se puede recordar cualquier misterio de Jesús con MARÍA como colaboradora a la voluntad de Dios. Santa MARÍA, ESPOSA DEL ESPÍRITU SANTO,QUE SEAMOS DÓCILES A LA MOCIÓN DEL ESPÍRITU SANTO.