SEGUNDO DOMINGO TIEMPO ORDINARIO 2011

En este segundo domingo del Tiempo Ordinario nos sigue ayudando la Iglesia a descubrir y a identificar quién es Jesús. Durante las fiestas de las navidades se nos presentaba a JESÚS Niño como el Mesías, el Señor, el Hijo de DIOS. El domingo pasado-fiesta del bautismo de JESÚS- es DIOS PADRE quien nos dice quién es JESÚS:" éste es mi Hijo, el amado, mi predilecto".
Hoy es Juan Bautista el que- como testigo enviado por el PADRE- nos dice quién es JESÚS y su misión.Todo anunciado ya en el Antiguo Testamento, señalado por Juan el Bautista, y ahora testigo de lo que el PADRE le ha comunicado para capacitarlo como testigo. Juan Bautista lo muestra como el "CORDERO DE DIOS QUE QUITA EL PECADO DEL MUNDO Y COMO HIJO DE DIOS". JESÚS cargará sobre sí los pecados de toda la humanidad para liberarnos del pecado y de la muerte eterna. "El que me envió a bautizar con agua me dijo: "sobre quién vieres descender el ESPÍRITU SANTO y posarse sobre Él, ese es el que os bautizará en el ESPÍRITU SANTO. Y yo lo ví, doy testimonio de que éste es el Hijo de DIOS". Lo vió el Bautista y todos los que allí estaban en ese momento.
Recordemos la imágen del "cordero" ya en Isaias y Jeremías,...es un animal fiel, silencioso, dócil, que se lleva al matadero sin quejarse. Se usaba para el sacrificio, recordad el hecho de Abrahan en el sacrifico de su hijo Isaac, sustituido por un cordero; el cordero pascual del pueblo de Israel en Egipto y la unción con la sangre del cordero sin defecto los dinteles de las puertas de los israelitas para liberarlos de la muerte de los primogénitos y paso de la esclavitud a la libertad. Como celebraron siempre esta fiesta: LA PASCUA JUDIA (paso de la esclavitud a la ibertad) y como JESÚS en la ÚLTIMA CENA CON SUS FAMILIARES- los apóstoles- celebra la Pascua Judia y pasa a ser Él el CORDERO DE DIOS QUE QUITA EL PECADO DEL MUNDO. Inaugura la PASCUA CRISTIANA (paso de la muerte a la vida. Se sacrifica hasta derramar su sangre para purificarnos de nuestros pecados y resucitar, manifestando así, el triunfo sobre la muerte, porque la muerte ya no tiene dominio sobre Él porque es la RESURRECCIÓN Y LA VIDA, Y TODO EL QUE CREA EN ÉL VIVIRÁ. Participamos en su muerte y en su resurrección por el sacramento del Bautismo.
Recordemos cómo antes de comulgar, en la Eucaristía rezamos tres veces: "Cordero de DIOS que quitas el pecado del mundo", y al mostrarnos el sacerdote la Hostia Consagrada nos dice: ÉSTE ES EL CORDERO DE DIOS QUE QUITA EL PECADO DEL MUNDO, DICHOSOS LOS INVITADOS A LA CENA DEL SEÑOR". Recordemos que CRISTO es el Cordero que da la vida para liberarnos de la esclavitud del pecado y vencer la muerte y, por Él, resucitar a una vida gloriosa sin fin.