DOMINGO 8º DEL T.O. 2011

Seguimos con JESÚS en el Sermón del Monte. Él empezó invitándonos a la felicidad, después lo que debe ser un discípulo suyo: "sal de la tierra, luz del mundo, etc. El Evangelio de hoy nos invita a los oyentes de entonces y de hoy, porque el evangelio es simpre actual, a tener una jerarquia de valores. JESÚS dice: "No alleguéis tesoros en la tierra, donde el la polilla los corroe,.. Atesorad tesoros en el cielo,... Donde está tu tesoro, allí estará tu corazón. Nadie puede servir a dos señores, pues o bien amará a uno y aborrecerá al otro. No podéis servir a DIOS y a las riquezas. No os agobiéis por el mañana qué comeréis, qué beberéis, qué vestiréis... Buscad, pues primero el Reino de DIOS y su justicia, y todo lo demás se os dará por añadidura".
¿ Qué nos quiere enseñar JESÚS? Que no viene a darnos teorias, sino un estilo de vida nueva, divina. Que debemos de tener una jerarquia de prioridad de las cosas de DIOS, de su Reino y relavizar las cosas de este mundo. que las podemos convertir, sin darnos cuenta o por el ambiente, en nuestros dioses, en los tesoros de nuestro corazón y ocuparlo sin satisfacer los anhelos de paz interior y felicidad que solamente DIOS puede dar. Debemos usar el sentido común para no convertir en primario lo que debe ser secundario. Contemplar la naturaleza con toda su belleza y cómo cuida DIOS de todo. Así quiere DIOS que nos abandonemos en Él, que confiemos en Él, en su Providencia (cuidado amoroso que DIOS tiene de todo los creado y de modo especial del hombre y la mujer). Nosotros valemos mucho más que las aves del cielo y que la naturaleza y nos dice como lo cuida DIOS, nos invita a que no nos agobiemos por esas cosas ya que Él sabe que las necesitamos. No quiere decirnos que no hagamos nada y estemos dormidos, sino que debemos trabajar, colaborar con Él en la construcción de un mundo mejor y más justo, que no lo es ; y no por culpa de DIOS, sino por los egoísmos del hombre y mujer, por codicia de los hombres; la avaricia del ser humano parece que no tiene límites aunque mueran millones de seres humanos de hambre. Esto no se soluciona con unas limosnas después de haberse enriquecido injustamente. De provocar desajustes económicos mundiales, de aumentar el paro, la pobreza, el hambre,... Hoy, comprendo las dificultades de muchas familias, los agobios de las mismas cuando llegan las horas de comer, de vestir, y no entra un euro en el hogar. A pesar de todo esto JESÚS, que lo sabía y sabía que muchos no iban a colaborar en el compartir y en ser justos, nos recomienda que no nos agobiemos, que nos fiemos de DIOS, que nos abandonemos en Él. DIOS no falla nunca. Tened fe fuerte en Él y lo comprobaréis en vuestras vidas. Santa Teresa de Jesús rezaba: " Quien a DIOS tiene nada le falta. Sólo DIOS basta". Meditemos en la Providencia de DIOS. No os fallará. Confiad. Pedid a María que interceda por vosotros. Es madre. María no nos olvida.

DOMINGO 7º T.O. 2011

En este domingo, séptimo, Jesús nos sigue enseñando desde el Monte de Las Bienaventuranzas. Él sigue dando perfección a la Ley y usando antítesis. Hoy las dos últimas: La l a ley del talión. JESÚS nos la recuerda: “Habéis oido que se dijo: Ojo por ojo y diente por diente”. Pero yo os digo: No resistáis al mal, y si alguno te abofetea en la mejilla derecha, dale también la izquierda…” La ley del talión nos puede parecer a los seres de hoy una barbaridad, algo increible. Puede parecer, pero no es tal, si prestáis atención a lo que sigue: Lo que pretendía la ley del talión era salvaguardar la justicia y evitar las venganzas excesivas. Que no se tome la justicia por la mano y, si me haces esto, ahora me voy a vengar el doble, para evitar esto es la ley del talión, por eso esta ley establece la equivalencia del daño y la pena. Por eso JESÚS dice: “Pero yo os digo…” No resistáis al mal, y si alguno te abofetea… Nos propone un modelo nuevo de vida para sus discípulos basado en la misericordia y el perdón.
El segundo ejemplo que nos propone Jesús:"Habéis oido que se dijo: "Amarás a tu prójimo y aborrecerás a tu enemigo. Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos y orad por los que os persiguen , para que seais hijos de vuestro Padre, que está en los cielos..." Esto es enaudito, humanamente no se entiende o no queremos entenderlo. Pero es del todo novedoso. Es un canto de amor a los enemigos, es una puerta que nos lleva directamente a la Voluntad de DIOS, a la santidad de DIOS. Nuestra santidad debe ser interior, sincera, real. No externa como la de los escribas o fariseos. "Sed, pues, perfectos, como es perfecto vuestro Padre celestial". JESÚS nos invita a entrar en una dinámica nueva: El amor. Responder al mal con el bien. Este estilo de vida de JESÚS tiene poco que ver con la dinámica del mundo de hoy. Es lo contrario de lo que vemos y observamos a nuestro alrdedor. Los criterios del mundo son distintos a los criterios de DIOS y de su Palabra. En nuestro mundo impera el egoísmo, la venganza, dominar a los demás, pasar por encima de ellos para subir yo, etc. El Señor nos pide que estemos en el mundo y que seamos levadura en la masa, sal de la tierra y luz del mundo,.. para contribuir a construir el Reino de DIOS en torno nuestro. Tenemos que perdonar a nuestros enemigos. JESÚS perdonó durante su vida terrena y pública a sus enemigos, nos perdona a nosotros tantas cuantas veces sea necesario y le pidamos perdón. Perdonó en la Cruz a sus verdugos: " Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen". Y debemos orar por los que nos persiguen, calumnian, insultan, nos hacen daño psíquico, físico, moral, de hacer el vacío hacia otros... Nosostros solos no podemos vivir esta invitación de JESÚS, pero nos ha ofrecido su gracia, estar siempre con nosotros hasta el fin de los tiempos, nos da su ESPÍRITU SANTO ya en el Bautismo. Él está con nosotros. No nos deja huérfanos nos da a su Madre: María. Ánimo, adelante que con Él podemos vivir dando testimonio de perdón, amor a nuestros enemigos. Estad alegres porque vuestra recompensa será grande en los cielos. Vivamos abandonados en las manos de DIOS, que es donde mejor estamos.

DOMINGO 6º DEL TIEMPO ORDINARIO.2011

El evangelio de este domingo empieza con la frase de JESÚS:" No he venido a abolir la ley y los profetas; sino a darle perfección,.." El Señor dió por medio de Moisés la Ley en el Monte Sinaí, ley natural impresa en el corazón de cada ser humano. Normas muy avanzadas para aquellos tiempos en que Israel tenía unas leyes superiores a las de los pueblos vecinos. JESÚS no niega la Ley del Sinaí, sino que tal como las cumplían era una rutina y cumplimiento meramente externo, pero JESÚS le da vida, perfección. No es algo exotérico, sino que quiere que sea algo interior, del corazón; porque de dentro, del corazon del ser humano es de donde sale lo bueno o malo. JESÚS quiere dar interioridad, espíritu interior para ser verdaderamente libres y que el vivir la Ley nos va a unir más al Señor. En este domingo veremos sólo las cuatro primeras antítesis:"Habéis oido que se dijo:" No matarás; el que matare será reo de juicio". Pero yo os digo (notaréis en esta frase la autoridad de JESÚS) que todo aquel que irrite a su hermano será reo de juicio. JESÚS no solamente afirma la Ley, sino que condena toda violencia física, psíquica, insulto,enemistad, enfrentamiento,... También es digno de juicio. Las dos siguientes miran al comportamiento del hombre y de la mujer. " Habéis oido que se dijo: No adulterarás. Pero yo os digo que el que mira a una mujer deseándola, ya adulteró con ella en su corazón".Lo mismo podemos decir de la mujer respecto al hombre, tanto en el deseo como en el divorcio. JESÚS se refiere a la unidad del ser humano ante la Ley que debe ser igual para el hombre que para la mujer. Seamos limpios interior y exteriormente. Os invitaría a los esposos que lleven mucha vida de oración-y si oran juntos mucho mejor, sería lo deseable-frecuenten los sacramentos, ( la confesión y la Eucaristía), hablen con algún sacerdote para que les oriente y ayude. No precipitarse para separarse que no es bueno, también fuistéis novios varios años antes de casaros . "También habéis oido que se dijo: No perjurarás,...Pero yo os digo que no juréis de ninguna de las maneras. ni por el cielo... "Y cumplirás tus votos al Señor..." Esto corresponde al ambito de nuestras comunicaciones, nuestras relaciones. Y que nuestras relaciones humanas dejan bastante que desear porque no tenemos como base la verdad, sino el engaño, la mentira, el ser ambiguos, nos deshacemos en una palabrería superficial,..JESÚS quiere que sentemos la base de nuestras relaciones humanas en: la verdad, la sinceridad de nuestro corazón y de nuestra alma. No hace falta jurar para que los demás nos crean, sea nuestra palabra "si" o "no". La enseñanza de este evnagelio no sólo es cumplir por cumplir, que sirve de poco, sino de vivir la Voluntad de DIOS con mucho amor, pues eso es lo que hizo JESÚS en su vida amar al PADRE Y A NOSOTROS. Poned mucho amor en todo lo que hagáis cada día para la gloria de DIOS y bien vuestro. Notaréis una alegría y satisfacción interior envidiables. Mirad a María, a los santos, a tantos hombres y mujeres que diariamente trabajan y luchan por vivir unidos al Señor y sacar una familia adelante. Ánimo contáis con la ayuda de DIOS.

DOMINGO 5º DEL T.O. 2011

El domingo pasado recordabamos cómo JESÚS hacía la introducción y resumía el "Sermón del Monte". JESÚS sigue hablándonos a sus discípulos con unas figuras muy conocidas: "sal y luz".
"Vosotros sois la sal de la tierra". En presente no en un potencial desiderativo: "Sois la sal de la tierra" en cuanto sois mís discípulos. Sabemos muy bien para que sirve la sal(cloruro sódico:
CLNA): Da sabor a los alimentos y los preserva de la corrupción. Es una figura muy bonita que se puede decir a una persona o a un grupo. Eres sal quiere decir que tienes alegría, buen gusto, que tienes una gran vida y riqueza interior, que preservas de la corrupción a los demás, que sabes dar sabor a la vida y a las cosas. Para que huela menos a podrido nuestro mundo de hoy los discípulos de JESÚS debemos ser de verdad "sal de la tierra". Para ser de verdad "sal" debemos de tener una intensa vida interior donde seamos dóciles a la acción del ESPÍRITU SANTO viviendo la vida de la gracia( y si pecamos recuperarla rápidamente con una confesión sincera), vivir intensamente la caridad, ser valientes sin miedo al mundo, pues CRISTO está con nosotros en la labor de dar sabor al mundo de que CRISTO es el Hijo de DIOS y Salvador del mundo; para que no se desvirtue la sal debemos cultivarla, abrirnos a la gracia del Señor, alimentarnos de su Cuerpo y de su Sangre; para que la sal de su fruto debemos mezclarnos con los hermanos, no podemos quedarnos en nosotros, aislados de todos. ¡Cuidado con que la sal se vuelva sosa! Porque no sirve para nada y será pisada. Así nos puede pasar a nosotros si nos volvemos sosos, porque seremos pisados. Cuando no salamos, y no damos testimonio de CRISTO, que es lo que espera el mundo de los dsicípulos de JESÚS no servimos para nada. No se cuenta con nosotros para nada, no hay peso del cristiano en la sociedad, la sociedad sigue huyendo de DIOS, se dan leyes contrarias a la Voluntad de DIOS. ¿ Por qué? Porque no entamos presentes en nuestra sociedad. Debemos salir al encuentro de los otros con fuerza interior, con alegría y con las virtudes propias del CRISTO Y SU EVANGELIO.
También es hermosa la figura de la "luz": "Vosotros la luz del mundo"La luz da alegría, optimismo. En la oscuridad no descubrimos las cosas bellas de la creación, las obras de arte,...DIOS es luz sin ninguna mancha de oscuridad. La luz vino al mundo y el mundo no la recibió, prefirió seguir viviendo en tinieblas, en oscuridad. JESÚS ilumina al mundo porque es la "luz del mundo." Nos ilumina con su Palabra y con su Vida. Cada uno y toda la Iglesia debemos ser luz para los hermanos, dar resplandor de CRISTO en el mundo porque el mundo quiere ver luz y ver buenas obras para seguir a JESÚS, SU SALVADOR, POR QUIEN ENTREGÓ SU VIDA EN LA CRUZ: ESTE ES EL AMOR DE DIOS HACIA NOSOTROS Y TESTIMONIO DE JESUS POR EL PADRE. Seamos sal y luz del mundo como quiere JESÚS con nuestra obras. Estamos siempre a tiempo de empezar a serlo con la gracia de DIOS. Santa María intercede por nosotros.