martes, 29 de agosto de 2017

DOMINGO 22 DEL T.O. JESÚS HABLA A LOS SUYOS DE SU PASIÓN.

 Recordemos cómo el domingo pasado, Jesús llama "dichoso" a Pedro por la divina confesión de  que Jesús, es el HIJO DE DIOS. Solo lo pudo manifestar por revelación del Padre, sigue de inmediato otra catequesis de Jesús para enseñarles lo que tiene que sufrir, padecer en Jerusalén . Ante este anuncio de Jesús se cree con autoridad para aconsejarle de eso no le puede suceder, y Jesús a quien había llamado dichoso, ahora le dice:¡" Apártate  de mí. satanás! porque piensas como los hombres no como Dios.
 La Pasión, dolor, sufrimiento, cruz de Jesús es por nosotros; es porque la voluntad del Padre es para pagar por nuestros pecados, pecados de toda la humanidad, al que no conocía el pecado, Dios Padre lo cargó con el pecado de todos, es más, creo que hay una frase en la Biblia que dice:" lo hizo pecado, por llevar todos los pecados personales y sociales del mundo. También para demostrarnos su infinito amor a nosotros, mostrándonos a Jesús siendo la bondad y misericordia de Dios Padre; por otra parte el amor y entrega y amor del Hijo al Padre y a nosotros,pues para eso se encarnó en María, la Virgen para poder sufrir, " pues me diste un cuerpo capaz del sufrimiento". También demuestra la gravedad del pecado, ofensa a Dios, a la santidad de Dios, de la iniquidad del hombre respecto a  Dios. La redención, consiste en eso: en satisfacer a la santidad divina por las ofensas de los hombres, y solamente puede satisfacer otro que tenga  la misma categoría que la persona ofendida:DIOS y a Dios solo le satisface Dios mismo y de ahí que el Hijo tomara nuestra naturaleza humana sin contaminación- de ahí que llenara de gracia a María desde el primer instante de su concepción, anticipando los méritos que Jesús iba alcanzar en la vida, pasión, muerte, resurrección y ascensión de Jesús al cielo.
 Ante esta enseñanza de Jesús, nosotros-como nos dice Jesús- debemos llevar la cruz de cada día y seguirle. Lo más seguro de nuestra vida de cristiano es llevar la cruz de cada día con alegría, con fe y amor.
 Pedro al oír esta enseñanza de lo que debe sufrir al subir a Jerusalén, Pedro se lo quiere impedir dándole un buen consejo-mal consejo, pues ponerlo en tentación de que no realice la redención del género humano, y, por esto, le dice Jesús:¡Ápartate de mi vista satanás,... Podemos pasar de la dicha a la  reprobación  por parte de Jesús, porque no le seguimos en el camino de la vida y salvación que nos viene de la cruz. La cruz es el signo de la vida, de la salvación, de la luz, de la resurrección.
 La cruz la tenemos todos y todos los días. Pidamos al Señor que nos ayude a descubrir la salud de la cruz y le sigamos por ese camino de la cruz de cada día. La vida del cristiano no es solamente un cúmulo de enseñanzas, de leyes,  de promesas, de ceremonias, ritos, culto,... todo ha de estar al servicio de nuestra comunión con Cristo en seguirle por el camino de la cruz. No busquemos la cruz cada día, pues dios te la tiene destinada para cada día y para cada uno y que con su gracia la podemos llevar,  pero cuando la ponemos nosotros lo que nos guste, o creamos que esa es mi cruz,.. esto es muy erróneo, porque.aunque nos de también su gracia nos va costar muchísimo llevarla. Santa María, Madre de Dios y nuestra desde junto a la cruz en la persona de Juan, intercede por nosotros para saber llevar la cruz de cada día con amor, fe y alegría.

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